Mucho hemos hablado de la lealtad que en muchas ocasiones demuestran nuestras mascotas, pero en esta ocasión, la historia que te vamos a contar es diferente: se trata de un grupo de barrenderos quienes mostraron el gran corazón que tienen al adoptar un perrito de la calle. Su acto heroico se viralizó de inmediato en las redes sociales, pues ahora el amado canino ¡los acompaña todos los días a trabajar!
Los hechos ocurrieron en Brasil, cuando personal de limpieza, localizó al peludito con evidentes signos de maltrato y desnutrición. El perrito, estaba hurgando en las bolsas de basura de la calle, en espera de encontrar algo para alimentarse. Los empleados del aseo, se conmovieron por el can y decidieron ayudarlo; cabe destacar que ésta no era la primera vez que veían al perrito callejero buscando entre los deshechos, sin embargo, en esta ocasión, la diferencia fue que el animalito ya estaba cansado por lo que no se echó a correr como comúnmente lo hacía, y aceptó la ayuda de los barrenderos.
Aunque hasta el momento se desconoce de dónde llego el peludito o cuánto tiempo pasó en esas condiciones, los empleados de limpieza dieron a conocer que en ese momento el can no tenía fuerzas ni para huir. Fue uno de los barrenderos a quien se le ocurrió la idea de llevárselo con ellos.
Al terminar su jornada de limpieza, decidieron llevar al peludito a un veterinario, por lo que tuvieron que cooperar entre todos para poder costear la consulta. Una vez en el centro de atención médica canina, el veterinario optó por no cobrarles un solo peso, por el tan solidario gesto de haber rescatado al perrito, que fue desparasitado y vacunado.
El peludito ahora forma parte de la cuadrilla de limpieza
Después de que la historia de este rescate llegara a oídos de su jefe, éste se conmovió tanto que permitió que el perrito se integrara como mascota de la empresa.
Actualmente el can duerme en el estacionamiento en donde guardan los camiones de recolección de basura, y todas las mañanas, sale nuevamente a las calles acompañando a sus rescatistas en su jornada laboral, eso sí, el animalito siempre es uniformado para distinguirse como uno más del equipo de limpieza. Pero lo más importante es que ahora, duerme bajo un techo, no le falta alimento y, sobre todo, ¡tiene a los mejores amigos del mundo y todo el amor que merece!