Localizan más de 150 contaminantes en el Río Atoyac
El Río Atoyac ha ganado fama como ‘el río de la muerte’ entre los habitantes de Villa Alta, Tlaxcala, vecinos del afluente de agua al que culpan de enfermarlos.
El ´río de la muerte’, es como algunos colonos aledaños al Río Atoyac, han decidido bautizar a este cause de agua que se encuentra en los límites de Puebla y Tlaxcala; la razón: aseguran que, desde hace más de 20 años, sus aguas han causado diferentes enfermedades entre los pobladores que habitan cerca de él. “Ahora se siembra muerte, se siembra desesperanza, tristeza”, dijo a TV Azteca una vecina del río.
Los colonos, aseguran que “casi nada sobrevive aquí”, pues lo poco que hay se reduce a basura.
“Está de cierta manera relacionado con la exposición ambiental a metales pesados y compuestos orgánicos volátiles”, comentó a TV Azteca, Omar Aguilar, investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Es bien sabido que el Río Atoyac se contaminó por diversos puntos de descarga; uno de ellos, relacionado a un reconocido parque industrial que se encuentra a unos cinco kilómetros del río, aprovechando la situación para desechar sus residuos al agua.
Vecina de Río Atoyac asegura que su hija enfermó por contaminantes
Uno de los 4 canales que se alimenta del Río Atoyac, atraviesa la comunidad de Villa Alta, ubicada en el vecino estado de Tlaxcala. La hija de doña Isabel, una vecina de la zona, compartió a TV Azteca que, en 2008, su hija enfermó de cáncer y lamentablemente, falleció al año siguiente; hoy, la mujer culpa a los contaminantes que hay en este cuerpo de agua.
“Le hicieron los estudios y ahí me dijeron los médicos que ella lo había adquirido por inhalación, y yo dije pues sí, por el río”.
Estudios apuntad que el Río Atoyac contiene sustancias tóxicas
El Centro de Derechos Humanos Fray Julián Garcés, que se dedica a la defensa de los derechos ambientales, localizó 150 sustancias tóxicas en el Río Atoyac.
“El benceno por ejemplo está demostrado que es cancerígeno, y aquí es un compuesto orgánico volátil que además se desprende en el aire y para donde corre, la gente lo está respirando permanentemente”.
Las autoridades municipales ya investigan sobre el tema, y en un mes tendrán los primeros resultados del estudio del agua, sin embargo, aseguran que es responsabilidad del Complejo Industrial dar a conocer qué desechan al río.
De hecho, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos emitió una recomendación en 2017, en la que advierte sobre la falta de saneamiento y tratamiento de los desechos industriales del Río Atoyac; en 2019 la Comisión Nacional del Agua CONAGUA y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales SEMARNAT, colocaron plantas de tratamiento de aguas residuales para mitigar la contaminación en la zona, pero durante un recorrido que realizó TV Azteca Noticias, no observó personal laborando en la planta, misma que aparentemente estaba sin funcionar.
“Se han quedado como elefantes blancos, en la cuenca según la Conagua hay 123 plantas de tratamiento, ninguna funciona al 100, el 47 por ciento, según datos de la Conagua, no tiene ningún funcionamiento, están obsoletas”, dijo Alejandra Méndez, directora del Centro Fray Julián Garcés en Tlaxcala.
En tanto, las autoridades municipales de aquella localidad contemplan la construcción de otras plantas para el saneamiento de este importante afluente de agua.
