El número de contagios de tos ferina ha aumentado, por lo que es importante tomar medidas para prevenir la enfermedad. Aquí te compartimos algunas recomendaciones para proteger tu salud y la de tus seres queridos.
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¿Cómo prevenir la tos ferina?
Evita contagiarte de tos ferina, siguiendo estas recomendaciones:
1. Vacúnate. La vacuna DTPa (difteria, tétanos y tos ferina acelular) para niños y para adultos necesitan aplicarse un refuerzo de tétanos, difteria y tos ferina esto cada 10 años.
2. Higiene y prevención. Debes de tener el hábito de lavarte las manos con agua, jabón frecuentemente. Utiliza gel antibacterial y no toques tu cara con las manos sucias. Además no olvides utilizar cubrebocas en lugares públicos y con mucha gente.
3. Evita el contacto con personas enfermas. Si tus compañeros o familiares están enfermos, evita acércate a ellos.
4. Atención médica temprana. Por último, si crees tener algun sintoma de tos ferina, acude al médico inmediatamente.
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¿Qué síntomas tiene la tos ferina?
Inicialmente, los síntomas se asemejan a los de un resfriado común, incluyendo los estornudos, la secreción nasal, fiebre no muy alta y una tos leve. Al cabo de dos semanas la tos se vuelve más grave y se caracteriza por episodios rápidos y numerosos de tos seguidos de espasmos o de un silbido agudo.
De inicio, los síntomas de las tos ferina pueden parecer como los de un resfriado común. Los síntomas son:
- Estornudos frecuentes
- Secreción nasal
- Tos
- Fiebre leve
Pero la diferencia de la tos ferina a un leve resfriado es que después de dos semanas, la enfermedad se intensifica con una tos más severa, entonces estos ataques se vuelven incontrolables que pueden causar dificultad para respirar. un dato clave para detectar si tienes tos ferina es que los que la padecen realiza una inhalación profunda que produce un sonido agudo, como un silbido. Los espasmos de tos pueden provocar fatiga extrema o dificultad para concebir el sueño.