Mujer adopta a perrita viejita y descubre que es la que perdió de niña

Es muy cierta la frase que dice “la vida da mil vueltas”, ejemplo de ello es la historia que te vamos a presentar a continuación, que seguramente te llenará de ternura como a nosotros: se trata de una perrita llamada Chloe, que después de 8 años de ser entregada a un refugio para animalitos, regresó con su querida dueña y hoy viven completamente felices.

Nicole Grimes, la dueña de la Pomerania-Caniche, recibió como obsequio de cumpleaños a Chloe, cuando apenas era una cachorrita. Fue su abuela, quien decidió regalarle a la tierna peludita en su cumpleaños número 10 porque Nicole era hija única, y anhelaba tener la compañía de una mascota.

La menor y su perrita Chloe pasaron 4 años juntas, tiempo en el que compartieron grandes experiencias y momentos llenos de amor. Sin embargo, las cosas cambiaron cuando el padre de Nicole tuvo que cambiar de trabajo, y comenzó a hacer home office, por lo que necesitaba un espacio tranquilo y sin ruidos, incluyendo los ladridos de la pequeña Chloe. Por ello, el padre de Nicole decidió entregar a la perrita a la Sociedad Humanitaria del área de Washington, separando a su hija, quien entonces tenía 14 años, de su amada peludita.

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Ocho años después, Nicole continuó su vida, se casó y se convirtió en madre. Pero una tarde, un flashazo de luz llegó a su vida cuando, navegando en las redes sociales, se topó con una publicación en la que se anunciaba a un perrito (muy parecido a Chloe) que estaba en adopción.

El peludito era cruza de Pomerania y Caniche, justo como su veja amiga, y, por si esto no fuera suficiente, también se llamaba Chloe. Además, la perrita tenía 11 años de edad, la misma edad que su Chloe habría tenido en esa fecha.

Tras sus sospechas, Nicole acudió al refugio de animalitos, para comprobar si se trataba de su Chloe. Vaya sorpresa que se llevó cuando se conocieron: Chloe pronto corrió hacia ella y le lengüeteó la cara como solía hacerlo cuando era niña, por lo que Nicole supo que se trataba de su vieja perrita.

Para corroborarlo, la familia de Nicole la convenció de llevar a la peludita con un veterinario, a fin de escanearla en busca de un microchip que le fue colocado cuando aún vivía con Nicole, y finalmente, comprobaron que era la misma Chloe que fue entregada al refugio 8 años antes.

Actualmente Nicole y Chloe son inseparables, especialmente porque su abuela, quien le regaló a Chloe, murió hace tres años. Hoy, pasan todo el tiempo juntas, y la mujer espera que su perrita se convierta en la amiga incondicional de su hija de apenas 4 meses, justo como lo fueron ellas hace años.

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